La tecnología militar acorta cada vez más la distancia con la ciencia ficción. Esta vez, el Ejército de EEUU construyó un aparato de alta energía que intercepta cualquier ataque de artillería en el aire y lo destruye antes que sea una amenaza para la base militar. De esta manera, el mortal laser crea un sistema de defensa perfecto y se convierte en el primer prototipo para más armas de esta clase.
En la prueba realizada en el polígono de White Sands, Nuevo México, se hizo varios disparos con un mortero de 60 mm, los cuales fueron destruidos en vuelo por el láser experimental. De esta manera, el revolucionario dispositivo de alta energía demostró su capacidad para detener rondas de artillería tradicional, antes de llegar a sus objetivos.
La iniciativa, denominada "High Energy Laser Mobile Demonstrator" (HEL MD), o demostrador móvil de láser de alta energía, es desarrollada por la empresa aeronáutica Boeing, por encargo del Pentágono.
"El sistema es capaz de detectar rápidamente por radar esos pequeños objetivos, apuntar el haz del láser, que tiene el tamaño de una moneda, y destruir el objetivo mientras está en vuelo", explicó Mike Rim, segundo director del programa en Boeing.
Aunque los tests tuvieron éxito, expertos estiman que el láser no estará operativo hasta 2022 si el Ejército decide comprar el sistema.