El Papa Francisco aseguró que abandonar la tradicional práctica cristiana del descanso dominical no representa un cambio positivo, por lo que no cree que trabajar en domingo sea bueno.
El Sumo Pontífice afirmó que la prioridad debería ser “humana y no económica”. “Quizás sea hora de preguntarnos si trabajar los domingos es una verdadera libertad”, comentó.
Asimismo, el Papa pidió a los padres pasar más tiempo con sus hijos. “¡Pasen tiempo con sus hijos!”, los exhortó y dijo que le agradaba preguntar a los padres si jugaban con sus niños.