Una resolución de la Unesco declaró como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad los rituales de las comunidades andinas y autoridades del distrito de Quehue, quienes renuevan cada año el puente colgante Q’eswachaka, en la región del Cusco.
Según informó el Ministerio de Cultura, el año pasado dicho organismo de la ONU inscribió los conocimientos, técnicas y rituales vinculados a esa renovación del puente inca, elaborado con fibras vegetales, en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
La titular de dicha cartera, Diana Álvarez Calderón, entregó el sábado la resolución de la Unesco a las comunidades y autoridades involucradas en el mantenimiento del puente, elaborado a partir de fibras de ichu (forraje) trenzado.
Su renovación se realiza todos los años, a través de un rito que se remonta a los Incas, y todas las familias de las comunidades aledañas participan en la recolección de la fibra y la fabricación de las sogas.
Q’eswachaka se sitúa sobre el río Apurímac y está ubicado a 3.700 metros sobre el nivel del mar. Tiene una longitud de 28 metros por 1,20 metros de ancho y forma parte de un tramo del sistema vial andino, conocido como el Qhapaq Ñan.
Álvarez entregó la resolución a los presidentes de las comunidades de Huinchiri, Chaupibanda, Ccollana Quehue y Choccayhua, así como a los maestros que dirigen el proceso de renovación, Victoriano Arizapana y Eleuterio Ccallo.
También fueron reconocidos el sacerdote andino Cayetano Canahuiri,encargado de los rituales y ofrendas durante la renovación; el alcalde distrital de Quehue, Paulo Oroche Taipe, y el burgomaestre de la provincia de Canas, José Ccama Cjuno.