Las caídas, golpes y fracturas en adultos mayores representan una preocupación creciente debido a su incidencia y a las complicaciones que pueden generar. En el marco del Día Internacional de las Personas de Edad, que se conmemora cada 1 de octubre, el Seguro Social de Salud (EsSalud), a través del Programa de Atención Domiciliaria (Padomi) y del Servicio de Transporte Asistido de Emergencia (STAE), ofrece importantes recomendaciones para prevenir ese tipo de accidentes y qué hacer o no ante una de esas ocurrencias.
Según los registros de la Línea 117 del STAE, solo en lo que va del año se han reportado 3227 casos de golpes y caídas en personas de la tercera edad. La Lic. Cecilia Carranza, vocera de dicho servicio, indicó que estos episodios ocurren con mayor frecuencia en habitaciones, pasadizos y baños, principalmente debido a factores como la falta de iluminación, la acumulación de objetos, la altura inadecuada de la cama y la ausencia de barandas o apoyos en la vivienda.
Otras causas -explicó el especialista- son el uso de medias o pantuflas inadecuadas, los pisos resbaladizos o lustrados y, en general, ambientes que no están adaptados a las necesidades de la persona adulta mayor.
Ante una caída de un adulto mayor, lo más importante es mantener la calma y no moverlo, pues podría haber una fractura, subrayó. Además, indicó que es importante mejorar el ambiente donde vive, pues debe familiarizarse con los espacios que tiene alrededor; es decir, crear un entorno seguro eliminando obstáculos, asegurando buena iluminación e implementando barras de apoyo.
También es necesario que el adulto mayor mantenga un estilo de vida activo con ejercicios de equilibrio, acotó. Además, revisar periódicamente su vista, audición y medicación, y que use calzado adecuado y dispositivos de asistencia como bastones o andadores si es necesario, refirió el emergencista.
Los asegurados o sus familiares pueden reportar este tipo de accidentes al STAE a través de la Línea 117 (llamada gratuita) y un equipo de EsSalud llegará al domicilio para atender la emergencia.
GRAVES CONSECUENCIAS
En tanto, el Lic. Jhon Polo, especialista en terapia física del Padomi, señaló que el riesgo de caídas en la vejez está estrechamente relacionado con los cambios físicos, sensoriales y cognitivos propios del envejecimiento, entre los que destacan la pérdida progresiva de la visión, la inestabilidad y las dificultades en el equilibrio.
Las caídas pueden ocasionar desde lesiones leves como golpes y contusiones hasta complicaciones graves como fracturas de cadera, muñeca o columna vertebral; esguinces, luxaciones y traumatismos craneoencefálicos, que limitan la movilidad y afectan la independencia y calidad de vida del adulto mayor. Ante ello, los especialistas del Padomi brindan orientación permanente a las familias durante sus visitas domiciliarias.
El programa ofrece orientación preventiva a pacientes y familiares, enfocada en mantener espacios seguros en el hogar, cuidar el uso de ropa y calzado adecuados y reforzar la movilidad mediante terapia física, favoreciendo así la estabilidad y condición de los asegurados.
Actualmente el Padomi cuenta con más de 53 mil adultos mayores inscritos y, en lo que va del año, ha realizado 85 493 atenciones regulares y 105 020 atenciones de urgencias, reforzando acciones de prevención para reducir los riesgos de caídas en el hogar.
“Los asegurados adultos mayores merecen todo nuestro reconocimiento. Han aportado mucho a sus familias y al país. Por ello, es una prioridad para EsSalud garantizarles una buena atención y todo el apoyo posible para prevenir accidentes, que a su edad resultan muy dañinos”, indicó el presidente ejecutivo de EsSalud, Dr. Segundo Acho Mego.