El Gobierno de Ollanta Humala, daría a la empresa bielorrusa Beltechexport, un contrato para reparar 25 aviones Sukhoi 25, de segunda mano, que ellos vendieron al Perú en 2006 a precio sobrevalorado y sin condiciones técnicas para repararlas.
Según lo publicado por un diario de la capital, la compañía logró que el Gobierno mediante el Ministerio de Relaciones Exteriores, firmara un convenio con Bielorrusia sobre cooperación técnico militar en la más absoluta de las reservas.
Este tema hubiese pasado desapercibido, si este marco legal, firmado el pasado 21 de octubre si la periodista Cecilia Valenzuela no lo hubiera hecho público en su programa televisivo del último viernes.
Allí se dieron detalles de cómo el coronel FAP en retiro Eduardo Cáceres advirtió al entonces ministro de Defensa, Daniel Mora, que se estaba buscando favorecer a esta compañía tercerizadora.
“El 3 de octubre le envié una carta a Mora donde le advertí lo que se planeaba al interior de la FAP, pero no respondió”, manifestó Cáceres.
Efectivamente, Eduardo Cáceres tenía la prueba que el presidente Humala y el canciller Rafael Roncagliolo delegaban al ministro Octavio Vizcarra para que firme este acuerdo entre ambos países.
Cáceres cuenta que Mora no hizo nada. Recién el martes 6, el ahora ex ministro de Defensa lo llamó a su despacho del Pentagonito.
“Contando con la presencia del inspector general, el almirante AP Juan Sierralta me señaló que no recordaba si había un documento que autorizaba al canciller para que firmara el contrato”, recordó.
El denunciante aseguró que, en ese momento, desde su teléfono, el ministro dio la orden para que no se firme ningún documento con Bielorrusia.
Por su parte el congresista Daniel Mora dijo que no sabía sobre la firma del convenio, pero que tampoco se sorprendía “porque no se puede dudar de un país y de una empresa que pudo cambiar en 15 años. No se puede desconfiar de todo el mundo y, menos, de la buena fe del canciller Roncagliolo”, indicó
