El analista político Agustín Figueroa criticó severamente a la justicia peruana pues sostiene que es “ineficiente y corrupta”, y rechaza que empresas como Odebrecht aún mantengan poder en el país. Así lo dio a conocer en una entrevista concedida al diario Expreso en la que también dijo que los actuales esfuerzos para combatir la corrupción son “insuficientes”.
Figueroa manifestó que el Estado y la justicia peruana son “blandos” y rechazó que la constructora brasileña continúe contratando con el Perú. Al ser cuestionado si es que considera que la justicia peruana es selectiva, Figueroa fue más allá y afirmó que “la justicia en el Perú es ineficiente y corrupta”.
Y argumentó su postura señalando que “distintos casos (judiciales) tienen distintos tiempos, no es lo mismo el fiscal que ve el asunto de Keiko Fujimori con el que ve el de Alan García o el que ve el de Alejandro Toledo y Ollanta Humala. Es una falacia”
LA PUNTA DEL ICEBERG
“Ahora solo nos estamos fijando en una cosa pequeñísima y no en todo el universo de corrupción”, indicó el especialista, asegurando que ello es consecuencia del “subdesarrollo político”. Aunque reconoció los esfuerzos que se vienen realizando para combatir la corrupción, advirtió que esto “no va a ser suficiente”.
“Básicamente hay que hacer un proceso de purificación del sistema y eso es más que estas cosas anecdóticas que estamos intentando ahora”, agregó que una reforma debería pasar por un proceso en el que se den nuevas leyes y se corrija el sistema electoral, que a su parecer es dirigido por magistrados.
"ODEBRECHT SIGUE SIENDO FUERTE"
“El sistema de justicia es un gran poder que se ha transformado en una gran mafia”, reiteró. Figueroa destacó además que llama la atención que gente de alto nivel, con acusaciones graves y “pruebas contundentes” no esté presa.
Finalmente, afirmó que el hecho de que algunos políticos o fiscales sean acusados “no quiere decir que se está venciendo la corrupción” y añadió que “Odebrecht sigue siendo fuerte”, además aseguró que "hay un montón de empresas brasileñas incluidas” que “aún no son tocadas".
Frente a esto, el analista instó a los políticos a no enfocarse “solo en lo pequeño” y tomar el asunto con mayor seriedad”, dejando de lado el debate entre el Ejecutivo y el Legislativo.
