Un reportaje de Panorama reveló impactantes imágenes de los denominados “piques” ilegales que se realizan en distintas zonas de Lima sin control de las autoridades. En los videos se observa cómo jóvenes con autos de alta gama realizan maniobras temerarias, aceleran a gran velocidad y bloquean vías públicas, poniendo en riesgo sus vidas y las de los transeúntes.
El último registro se produjo el sábado 11 de octubre, alrededor de las 11 de la noche, cuando un grupo de jóvenes se reunió en un grifo ubicado en el cruce de las avenidas General Juan Antonio Pezet y Coronel Portillo, en San Isidro. Luego de abastecerse de combustible, se dirigieron hacia la Costa Verde, donde cerraron el tránsito vehicular para realizar sus peligrosas competencias.
Durante estas concentraciones, los asistentes consumen alcohol y drogas, y conducen bajo los efectos de estas sustancias, incrementando el riesgo de provocar un accidente fatal. “Conducen sin control, hacen giros bruscos, carreras entre sí, y hasta graban los piques para subirlos a redes sociales”, reveló la investigación periodística.
Cuando la Policía Nacional llega a intervenir, los grupos se trasladan a otras zonas, como la avenida Canta Callao, y más tarde, a la plaza Agua Dulce, donde continúan con las carreras clandestinas. Vecinos de estas zonas han denunciado reiteradamente el ruido, el peligro y la falta de fiscalización municipal, sin obtener respuesta de las autoridades.
¿QUIÉN LOS DETIENE?
Expertos en seguridad vial advirtieron que este tipo de actividades podrían terminar en tragedias, como ya ha ocurrido en años anteriores. En ese sentido, exigieron a las autoridades policiales y a los municipios reforzar los patrullajes nocturnos y aplicar sanciones severas para frenar este peligroso fenómeno urbano que pone en riesgo a los ciudadanos.