El superintendente de la SUNEDU, Oswaldo Zegarra Rojas, participó este miércoles del I Foro de Universidades del Perú, actividad organizada por la Federación de Instituciones Privadas de Educación Superior (FIPES) en coordinación con la Asociación de Universidades Nacional del Perú (AUNAP) y el Consorcio de Universidades, con el objetivo de debatir y realizar aportes para la mejora del sistema universitario en el país.
Durante las ponencias sobre el Estado y el fortalecimiento de las capacidades de las universidades, el superintendente de la SUNEDU expuso sobre la sostenibilidad de las Condiciones Básicas de Calidad (CBC) establecidas por la Ley Universitaria y recordó que a la fecha hay 95 universidades públicas y privadas que cumplen con las CBC y más de 367 locales autorizados distribuidos en todas las regiones del país, lo cual ha beneficiado a más de un millón de estudiantes.
“Para continuar avanzando es importante entender qué decimos cuando se menciona la sostenibilidad de las Condiciones Básicas de Calidad, este concepto podríamos entenderlo como el mantenimiento o superación a lo alcanzado en el licenciamiento institucional hasta su vencimiento, y posterior renovación, de las licencias de las universidades. Sin embargo, la sostenibilidad de estas implica también la posibilidad de adaptarse a las nuevas circunstancias e innovar de acuerdo a la realidad dinámica de nuestro sistema universitario”, explicó.
Modificaciones de licencia
El titular de SUNEDU indicó que desde el 2017 a la fecha, el 56,8% de las universidades licenciadas han modificado su licencia institucional, teniendo como resultado la creación de 285 programas nuevos (257 privadas y 28 públicas), 2 filiales nuevas y 15 locales nuevos (9 privadas y 6 públicas). Además, por primera vez, 143 programas se dictarán en 13 diferentes provincias que no contaban con dicha oferta.
Ante ello, precisó que en este momento es necesario el acompañamiento y la supervisión del mantenimiento de las CBC, con las que se les otorgó la licencia a las universidades para operar durante un tiempo determinado.
En esa línea, entre el 2020 y el 2021 se dio inicio a 30 acciones de supervisión programadas a 30 universidades (10 públicas y 20 privadas). Durante el 2022, se realizará la supervisión programada a otras 15 universidades, con lo que la cobertura de la supervisión alcanzaría a cerca del 50% (45 universidades) de instituciones del sistema universitario peruano.
Además, recordó que desde el 2019, la SUNEDU viene trabajando en el licenciamiento de los programas priorizados de Medicina. “Actualmente 10 programas han sido licenciados, beneficiando a 9,169 estudiantes. Asimismo, 12 programas se encuentran en plazo de adecuación, otros 16 están siendo evaluados y 9 universidades están por presentarse para ser evaluadas. Y esperamos continuar con el licenciamiento de los programas de Educación e Ingeniería”, señaló.
Renovación de licencia
Respecto a la renovación de licencia, explicó que la SUNEDU ha venido trabajando con distintas universidades en reuniones de orientación que permitan que se preparen para iniciar la renovación de su licencia. Anunció que el próximo año se tendrá las primeras renovaciones de licencia, esto con el objetivo de asegurar que las universidades mejoren la calidad de la prestación de su servicio como exigencia básica para seguir operando, así como continuar con la protección del bienestar individual y social de aquellos que buscan acceder al sistema de educación superior.
“Estos son los temas que deberíamos debatir pensando en continuar la ruta de la mejora continua de la calidad. Desde el inicio de la reforma el centro de la misma son los estudiantes, dejémosles a ellos la ruta trazada. No retornemos a un sistema que ya demostró no obtener resultados”, precisó.
En ese sentido, exhortó a los congresistas a reflexionar sobre el intento de aprobar la autógrafa por insistencia que modificará la Ley Universitaria para incluir a rectores en el Consejo Directivo de la Superintendencia.
“Tenemos una amenaza pendiente contra la reforma universitaria en el Congreso. Esperamos que exista la suficiente flexibilidad para que no insistan en su aprobación porque sería retroceder. Independente de lo que se haga, no tenemos desesperación por mantenernos en el cargo sino por mantener un trabajo institucional, autónomo e independiente de cualquier influencia política o económica”, concluyó.