Una solución a los mercados tradicionales, los cuales eran criticados por generar aglomeraciones y propagar el coronavirus, fueron los mercados temporales, sin embargo, los ambulantes se han convertido en su mayor problema, pues les restan compradores y esto genera pérdidas en sus ventas.
En Chiclayo se implementaron mercados temporales a fin de generar mejores condiciones para abastecer de productos de primera necesidad. En junio, la comuna provincial instaló 40 módulos en la plataforma Juan Aurich, 20 en el local de la piscina municipal, otros 20 módulos en el Parque Infantil, y 40 más en la plataforma del pueblo joven Santa Rosa.
Sin embargo, muchos de estos comerciantes han encontrado problemas. Según Ernesto Bocanegra, subgerente de Promoción Empresarial y Formalización del Comercio, el comercio informal, la falta de sensibilización de la ciudadanía, la aparición del mercado móvil en las calles y la implementación de bodegas en los vecindarios están perjudicando a los mercados temporales.
“Lamentablemente hay falta de sensibilización por parte de la ciudadanía de asistir a mercados que ofrecen todas las condiciones. Muchos se dejan guiar por los precios bajos que ofrecen las personas que venden en las calles y ponen en riesgo su salud”, explicó Bocanegra al diario La República.
Los mercados temporales que más se han afectado con estos problemas son los instalados en el Parque Infantil y en pueblo joven Santa Rosa.