Una cartera de plástico inspirada en la típica bolsa de mercado peruana se ha convertido en el centro de un debate viral tras ser presentada por la reconocida diseñadora Meche Correa, en colaboración con la marca Ali Rapp. La pieza, que cuesta S/578, replica el estilo de las populares bolsas de rafia que se venden por menos de S/10, lo que ha generado tanto admiración como rechazo en redes sociales.
UNA PIEZA COTIDIANA CONVERTIDA EN LUJO
La colección busca resignificar un objeto masivo a través del lente del arte y la moda. Según fuentes cercanas a la diseñadora, se trata de una propuesta estética que reinterpreta lo popular y le otorga un nuevo valor simbólico. Sin embargo, muchos usuarios en TikTok e Instagram cuestionaron el precio y el concepto. “¿578 soles por la bolsa que uso para comprar papa?”, fue uno de los comentarios más virales.
El debate no solo gira en torno al costo, sino al mensaje que transmite. Críticos señalan que apropiarse de un símbolo de la cultura popular y convertirlo en lujo puede ser excluyente y hasta insensible, mientras que otros defienden el derecho del arte a transformar y resignificar elementos comunes del día a día.
FENÓMENO QUE TRASCIENDE FRONTERAS
La controversia no es nueva en el mundo de la moda. En 2021, la reconocida marca Balenciaga vendió bolsos inspirados en bolsas de rafia por más de USD 2,000, aunque hechos con cuero de alta gama. En el caso peruano, la polémica también se intensificó por el uso de plástico estampado, lo que ha hecho más evidente la diferencia entre valor material y simbólico.
Influencers como Alessandra Belaunde y Naye Rivas se han sumado a la conversación con videos que analizan la relación entre consumo, identidad y clase social. Mientras unos celebran el gesto provocador de Meche Correa, otros se preguntan si estamos ante una obra de arte o una estrategia de marketing envuelta en polémica.
