La medida ha generado opiniones a favor y en contra. Luego del desplome del techo del patio de comidas del Real Plaza de Trujillo, que dejó seis muertos y más de 70 heridos, muchos municipios comenzaron una serie de inspecciones a centros comerciales, que terminaron en clausura.
“Las municipalidades están fiscalizando y haciendo su trabajo ex post, pero cerrando los centros comerciales, cuando lo normal (…) es que los comercios tienen dos días para subsanar”, dijo José Contreras, gerente de la Asociación de Centros Comerciales y de Entretenimiento del Perú (ACCEP).
EMPRESA PROVEEDORA
Señaló también que lamentablemente, dichas clausuras, hasta ayer, de 29 centros comerciales en todo el país, ha afectado a 65 mil personas con empleos directos, muchas de las cuales dependen de ingresos variables no siempre fijos, y ha generado la pérdida de unos 35 mil empleos indirectos.
Esta situación igualmente ha perjudicado a distintas empresas proveedoras, entre ellas a las de bienes perecibles para los supermercados, como frutas, verduras, carnes y embutidos. Al impedirse la entrada de personas, estos locales de los malls deben dejar que estos productos se pierdan.
BÚSQUEDA DE NOTORIEDAD
“Si bien es cierto que hubo una tragedia (Real Plaza de Trujillo), la situación ha llegado a un extremo y se ha convertido en una búsqueda de notoriedad por parte de algunos municipios” señaló categórico el titular de ACCEP en amplia entrevista con Perú 21.