El Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal), emitió una preocupante advertencia y a su vez informó sobre las medidas que se deben tomar sobre la posibilidad de una inminente escasez de agua en Lima, atribuida a los efectos del fenómeno El Niño.
Este pronóstico insta a la población a tomar precauciones necesarias para evitar o al menos, atenuar posibles dificultades en el abastecimiento del recurso vital. Los expertos señalan que estamos presenciando lo que podría denominarse un ''estrés hídrico'', un estado de tensión derivado de la falta de precipitaciones suficientes y regulares.
LAGUNAS DISMINUYERON SU VOLUMEN
Según las autoridades, las lagunas que proporcionan agua a Lima, como Huascacocha y Marcapomacocha, han experimentado una disminución del 30% en su volumen po lo que Lima podría ser víctima de una escasez aguda de agua si la tendencia continúa, sobre todo, en el contexto del fenómeno El Niño.
El presidente del Directorio de Sedapal, Héctor Piscoya, reforzó esta preocupación en una declaración para un medio local, en donde también hizo un llamado a la conciencia ciudadana para que se tomen medidas de ahorro de agua. Recalcó la necesidad de iniciar procesos de conservación de agua en los hogares como forma preventiva y consciente de cuidar de un recurso que podría escasear.
El fenómeno El Niño tiene un rol clave en este escenario de estrés hídrico. Las irregularidades climáticas, causadas por los cambios en las temperaturas oceánicas, han contribuido a la reducción de las lluvias y, con ello, al nivel de agua en las lagunas que abastecen a Lima.
Detalles adicionales proporcionados por Sedapal especifican que, en un año bajo condiciones óptimas, los embalses acumularían alrededor de 331 millones de metros cúbicos de agua. Sin embargo, en la actualidad, los niveles apenas llegan al 70% de esa cifra.