Un equipo de neurocirujanos pediatras del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins logró enderezar y sostener en su lugar la columna vertebral de una adolescente de 16 años que sufría de una deformidad estética en el tronco por una escoliosis severa. Esto fue posible gracias a una cirugía de alta complejidad.
El pasado 11 de marzo, Xiomara fue hospitalizada en el Servicio de Cirugía Pediátrica para una intervención quirúrgica programada, la cual se realizó en dos tiempos debido a la complejidad. Ella sufría de escoliosis que con el tiempo fue avanzando en su forma más severa y derivó en serios problemas estéticos y de salud.
Los especialistas advirtieron que, si este mal seguía avanzando, hubiese provocado una compresión de los órganos internos, una restricción pulmonar y problemas de motricidad (dolor y alteración al caminar). El doctor Edwin Torres Huamaní, neurocirujano pediatra de Rebagliati, explicó que la operación se realizó en dos tiempos.
OPERACIÓN EN DOS TIEMPOS
La primera intervención se hizo el 14 de marzo para la liberación de las articulaciones facetarias y la colocación de tornillos en cada vertebra de la columna. La segunda operación fue el 21 de marzo con una duración de ocho horas, logrando corregir la escoliosis, permitiendo la nivelación de los hombros y logrando alineamiento del tronco.
El especialista informó que la cirugía se realizó de manera exitosa gracias al equipo multidisciplinario liderado por los neurocirujanos pediatras que tuvieron el apoyo de los cirujanos de tórax y cardiovascular, especialistas en neurofisiología, anestesiólogos, enfermeras, fisioterapistas, y otros profesionales de la salud.
ALTA MÉDICA
Luego de algunas semanas de la compleja intervención, la adolescente recibió el alta médica definitiva y retornó a su hogar de la mano de sus padres en medio de los aplausos y vivas de los médicos tratantes y personal asistencial que estuvieron a cargo de su atención.
“La paciente al tener esta deformidad grave estaba teniendo un mayor compromiso de los órganos internos que afectaba la calidad de vida de la paciente, pero hoy gracias a la operación tendrá una mejor calidad de vida y podrá retomar sus actividades”, resaltó Torres.
La madre de la paciente agradeció al personal médico del hospital que permitió realizar esta proeza médica. “Gracias a Dios y a los doctores mi hija salió victoriosa de esto. Como toda adolescente quería verse bien, me preocupaba porque jadeaba cada vez que respiraba porque ya se estaban comprometiendo otros órganos”, indicó.