La agencia de noticias italiana ANSA confirmó la muerte del médico Marcello Natali, quien hace unos días denunció en el medio Euronews que estaba atendiendo pacientes con coronavirus sin guantes porque se habían acabado.
El galeno tenía 57 años y no tenía ninguna patología previa especialmente grave. Tras ser diagnosticado con la infección, fue trasladado al hospital de Milán donde permaneció en cuidados intensivos por una grave neumonía bilateral. Pese a los esfuerzos no resistió.
El médico trabajaba en la localidad italiana de Codogno, en la región de Lombardía al norte del país, lugar que se convirtió en el primer epicentro del brote del Covid-19 de Europa.
“No estábamos preparados para el coronavirus: como médicos de la era posterior a los antibióticos, crecimos pensando que una píldora contra todo era suficiente. Ahora estamos recibiendo un baño de humildad”, aseguró aquel día que brindó su última entrevista.