El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, condenó enérgicamente los recientes ataques iraníes que causaron la muerte de al menos 13 personas, incluidos mujeres y niños, en varias ciudades israelíes. Durante una visita a Bat Yam, una localidad cercana a Tel Aviv donde un misil balístico destruyó parcialmente un edificio residencial, Netanyahu aseguró que Irán enfrentará severas consecuencias. “Irán pagará un alto precio por matar a civiles, mujeres y niños intencionadamente. Lograremos nuestro objetivo de un solo golpe”, afirmó el mandatario, destacando la determinación de Israel para responder a la agresión.
El ataque en Bat Yam, que dejó al menos seis víctimas fatales, dos de ellas menores, ha intensificado las tensiones en una región ya marcada por la escalada militar entre Israel e Irán. Netanyahu, acompañado por el ministro de Defensa, Israel Katz, y otras autoridades, recorrió la zona afectada, donde un edificio de diez pisos quedó gravemente dañado. El primer ministro instó a la población a seguir las medidas de seguridad, enfatizando que “quien las escuchó y cumplió, y se encontraba en una zona protegida, se salvó. Quien no lo hizo, lamentablemente, resultó herido”. La ofensiva iraní, que incluyó bombardeos en los últimos días, ha generado más de 350 heridos en Israel, según reportes oficiales.
Un objetivo estratégico: cambiar el panorama en Oriente Medio
El presidente israelí, Isaac Herzog, también visitó el lugar del ataque y respaldó la postura del gobierno, señalando que la ofensiva aérea de Israel contra Irán busca “cambiar la realidad en Oriente Medio”. Herzog acusó a Teherán de armar a grupos hostiles en la región y de avanzar en su programa nuclear, al que calificó como “la más peligrosa para la humanidad”. Sin embargo, expertos citados por medios internacionales, como Axios, han señalado que Israel enfrenta limitaciones técnicas para destruir instalaciones nucleares iraníes, como la planta de Fordow, lo que ha llevado a Netanyahu a solicitar un mayor respaldo de Estados Unidos.
La escalada de hostilidades ha generado preocupación global, con líderes mundiales llamando a la contención para evitar un conflicto regional más amplio. Netanyahu, por su parte, expresó su confianza en el apoyo de aliados clave, mencionando específicamente el respaldo del presidente estadounidense, Donald Trump. Mientras tanto, Irán ha prometido una respuesta “contundente” a los ataques israelíes, que han causado bajas significativas, incluidos altos mandos militares y científicos iraníes. La situación sigue siendo volátil, con ambos países intercambiando amenazas en un contexto de creciente tensión geopolítica.
