El gobierno de los Estados Unidos anunció hoy la suspensión de toda la asistencia exterior financiada por el Departamento de Estado y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), incluyendo los programas dirigidos al Perú.
Esta medida, que entrará en vigor con un plazo de evaluación de 90 días, busca garantizar que los programas de ayuda sean eficientes y estén alineados con la política exterior de EE.UU., en el marco de la agenda "Estados Unidos Primero".
La decisión se enmarca en una reevaluación de la efectividad de la cooperación internacional, especialmente en áreas como la lucha contra el narcotráfico.
Revisión de ayuda contra narcotráfico
Estados Unidos ha sido uno de los principales financiadores de la lucha contra el narcotráfico en América Latina, proporcionando recursos y apoyo logístico, como helicópteros, para combatir cultivos ilegales y organizaciones criminales.
Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, el narcotráfico sigue siendo un problema persistente en países como Perú y Colombia, donde las rutas de tráfico de drogas se han sofisticado con el uso de nuevas tecnologías y estrategias.
Relaciones internacionales
La medida no se limita a la lucha contra las drogas, sino que también abarca otras áreas de la política internacional, como las relaciones económicas y migratorias. La suspensión de la asistencia exterior también marca un giro en la estrategia de EE.UU. hacia América Latina.
