Un ataque cibernético afectó a Japan Airlines el pasado jueves, generando retrasos significativos en 24 vuelos nacionales, interrupciones en la venta de boletos y problemas en el sistema de registro de equipaje en varios aeropuertos. La aerolínea, segunda en importancia en Japón después de All Nippon Airways (ANA), aseguró que sus sistemas ya han sido restablecidos y que no hubo compromiso en la seguridad de los datos de los clientes.
¿QUÉ SUCEDIÓ Y CÓMO REACCIONÓ JAL?
Según un comunicado de Japan Airlines, el ataque fue identificado como una acción DDoS, un método en el que los hackers saturan servidores y páginas web para interrumpir su funcionamiento. La venta de boletos, tanto nacionales como internacionales, fue suspendida temporalmente, aunque se reanudó el mismo jueves.
El incidente también provocó retrasos superiores a 30 minutos en varios vuelos y afectó la operativa de los sistemas de equipaje en aeropuertos clave. A pesar del impacto, la aerolínea aseguró que la seguridad y la información personal de los clientes no estuvieron en riesgo.
ANTECEDENTES DE CIBERATAQUES EN JAPÓN
La noticia afectó inicialmente las acciones de JAL, que cayeron hasta un 2.5% en la bolsa de Tokio durante la operativa matinal. Aunque la aerolínea logró estabilizar su cotización con una pérdida menor del 0.2% por la tarde, el evento subraya el creciente riesgo de ciberataques en Japón.
En los últimos años, empresas japonesas han sido blanco de acciones similares. En 2022, un ataque afectó a un proveedor de Toyota, obligando a suspender las operaciones de sus plantas por un día. En junio de este año, el sitio de videos Niconico también suspendió sus servicios tras un ciberataque a gran escala.
Japan Airlines continúa evaluando medidas para fortalecer su ciberseguridad, mientras el país enfrenta una ola creciente de incidentes que ponen a prueba las defensas digitales de grandes empresas e instituciones.