Chad McQueen, reconocido por su papel de Dutch en "The Karate Kid", ha fallecido a la edad de 63 años. La noticia fue confirmada por su abogado Arthur H. Barens a The Associated Press este miércoles. La causa de su muerte no ha sido revelada. McQueen, quien también siguió los pasos de su padre en las carreras de autos, deja atrás una carrera diversificada tanto en el cine como en el deporte automovilístico.
DE LAS PANTALLAS A LAS PISTAS DE CARRERA
Tras su paso por la actuación, Chad McQueen se dedicó más intensamente a las carreras, una pasión que heredó de su padre, Steve McQueen, también un aficionado al automovilismo. Fundó McQueen Racing, una compañía dedicada a la creación de autos, motocicletas y accesorios personalizados. En una entrevista en 2005, Chad expresó su cambio de enfoque de la actuación a las carreras: “Actuar ya no me parecía divertido, así que decidí dedicarme por completo a las carreras”.
UN HOMBRE DE FAMILIA Y EMPRESARIO
Chad McQueen también se destacó como un padre y esposo devoto. En un comunicado publicado por su familia en Instagram, se destacan su "trayectoria como padre amoroso" y su "compromiso inquebrantable con nuestra madre". Sus hijos, Chase y Madison, quienes ahora dirigen McQueen Racing, aseguran que continuarán el legado de su padre y abuelo, preservando su pasión y dedicación al mundo del automovilismo.
El actor también produjo documentales sobre su padre, incluyendo “I Am Steve McQueen” y “Steve McQueen: The Man & Le Mans”, obras que reflejan su profundo respeto y admiración por el legado de su familia. Chad McQueen es sobrevivido por su esposa Jeanie y tres hijos, en un momento donde su familia pide privacidad para celebrar y recordar su vida excepcional.