En su informe sobre la Situación y perspectivas de la economía mundial (WESP) 2024, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proyecta que “la economía de América Latina y el Caribe enfrentaría una desaceleración en el 2024 al crecer solo 1.6% durante los doce meses”.
Esta proyección, poco alentadora, se da pese a la mejora que se observó durante el año pasado, ahora los expertos de la ONU advierten que el 2024 nuestra región se verá afectada por diversos factores como las políticas monetarias restrictivas que podrían afectar negativamente la demanda interna.
“Si bien la inflación ha venido retrocediendo, se mantiene en niveles elevados y persisten los retos estructurales y de política macroeconómica”, señala el informe de la ONU.
Por otro lado, para la Organización de las Naciones Unidas, las vulnerabilidades estructurales como las incertidumbres políticas pesarán negativamente sobre la inversión en América Latina.
