Al menos 50 personas habrían muerto ahogadas frente a las costas de Túnez al naufragar el bote en el que habían salido el domingo desde una playa de Libia con la intención de llegar de forma irregular a Europa, informó hoy la Organización Internacional de las Migraciones (OIM).
"Nuestros equipos en Túnez han proveído de ayuda humanitaria a aquellos que pudieron ser rescatados, y también un lugar para refugiarse", explicó Safa Msahli, un portavoz de la ONU, que volvió una vez más a pedir responsabilidad y un cambio en las políticas de migración para respetar los derechos y evitar más muertes en el mar.
La embarcación precaria, con la que los migrantes trataban de llegar a la cercana isla italiana de Lampedusa, se hundió debido a las malas condiciones, el sobrepeso y las condiciones climáticas adversas, con lluvia, fuertes vientos y gran oleaje.