Desde Corea del Norte el mundo fue testigo de un momento insólito, y es que el líder de esa nación, Kim Jong-un, durante su último discurso no pudo evitar derramar alguna lágrima al recordar el trabajo y los esfuerzos los médicos y personal sanitario para hacer frente a la pandemia del nuevo coronavirus COVID-19.
El hecho fue registrado en un desfile militar donde Kim ha mostrado su poderío militar con misiles balísticos intercontinentales, fue en ese momento que su voz tembló momentáneamente mientras hablaba de las “lágrimas de gratitud” por los esfuerzos de su pueblo.
El líder norcoreano agradeció entre lágrimas a su ejército y deseó a sus "queridos compatriotas del Sur" que superen al Sarv COV-2.
El desfile militar organizado en Pionyang fue por el 75º aniversario del partido único norcoreano y Kim dijo que su país "seguirá fortaleciendo su fuerza militar para auto defensa y disuasión", aunque aseguró que nunca usará dicha fuerza "para atacar" de manera preventiva a ninguna nación.