Un exrepartidor podría cumplir perder su libertad tras escupir en una pizza antes de entregarla a un cliente. Por este motivo, un fiscal ha solicitado hasta 18 meses de prisión en su contra.
El hecho se registró el 24 de diciembre de 2017 en la ciudad de Eskisehir, ubicada en Turquía. Sin embargo, su accionar no pasaría desapercibido para la hija del propietario del edificio donde vive el agraviado, quien se percató de lo ocurrido por las cámaras de seguridad y alertó al inquilino que presentó la denuncia.
Entre los cargos que se le imputan figuran “poner en peligro la vida o salud de otras personas alterando los alimentos” y “degradación de la propiedad”, motivo por el cual el fiscal solicita entre dos años y medio y 18 años de prisión. (Con información de AFP)