A pocas horas que el Pentágono estadounidense confirmara la muerte del general Qassem Soleimani en un ataque al aeropuerto de Bagdad, Irán ha prometido vengar la muerte del poderoso militar.
“La gran nación de Irán se vengará de este crimen atroz”, tuiteó el presidente iraní Hassan Rouhani después de que se confirmara la noticia.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, dijo que “una fuerte represalia está esperando a los delincuentes cuyas manos sucias derramaron su sangre”.
Por su parte el ministro de Relaciones Exteriores del país, Javad Zarif, calificó el ataque estadounidense como “un acto de terrorismo de estado y una violación de la soberanía de Irak”.
Por su parte, la Embajada de Estados Unidos en Bagdad suspendió sus operaciones consulares públicas hasta nuevo aviso, y además instó este a todos sus ciudadanos a abandonar el país inmediatamente.
“Los ciudadanos estadounidenses deben partir a través de una aerolínea mientras sea posible y, en su defecto, a otros países por tierra", señala la alerta de seguridad.
Como se sabe, el bombardeo estadounidense mató a Qasem Soleimani, el comandante considerado como el segundo hombre más poderoso en Irán después del líder supremo ayatolá Alí Jamenei.
El gobierno norteamericano por su parte ha defendido esta operación militar autorizada por Donald Trump apoyándose en el ataque de una turba proiraní a la embajada de EEUU en Bagdad.