Con las horas contadas. Ante la presencia de 100 mil vehículos que entran y salen de Bruselas, en Bélgica, provocando tráfico y contaminación del aire por encima de las recomendaciones europeas, las autoridades decidieron tomar cartas en el asunto.
Es así que un proyecto busca prohibir los coches diésel para 2030 y los coches de gasolina para 2035. La idea es de la ministra de movilidad de Bruselas, Elke van den Brandt, que quiere acabar con uso masivo de autos en la capital europea
Los expertos advierten que para que Bélgica pueda lograr los retos climáticos de la Unión Europea para 2030, el país tendrá que reducir los coches drásticamente. Para ello se necesita un transporte público las 24 horas del día y una alternativa a los incentivos basados en coches de empresa, o la batalla entre el coche y la bici se recrudecerá.