En Estados Unidos, un hombre fue condenado a nueve años de prisión por apuñalar a un perro 11 veces en un aparente acto de venganza, arrojar los restos en la puerta de la casa de su dueña, al tiempo que le decía en Snapchat que parecía que estaba teniendo un día "perro".
Las autoridades señalaron que la dueña del animal acudió en mayo a su puerta, luego de que alguien tocó, y se topó con los restos de su mascota en una bolsa de basura.
Medios internacionales señalaron que la mujer aseguró a las autoridades que los hechos fueron en represalia por llamar a la policía después de que Andrew Nipper (acusado) acechara a su amiga. Además, contó que su vecino también intentó atropellarla con su auto.
Los documentos del tribunal informaron que la policía pudo dar con el asesino del perro dos días después del hecho, ya que Nipper se sacó una selfie con el animal y se la mandó a una persona de su confianza.
