Al menos 35 personas han muerto, decenas están heridas y diez figuran como desaparecidas, por las inundaciones, corrimientos de tierra y otros desastres causados por la tormenta tropical Usman a su paso por Filipinas este fin de semana.
Según las autoridades, las muertes ocurrieron principalmente en las regiones de Bicol y Visayas Oriental, cuyas poblaciones están aisladas y no cuenta con medicinas, servicios de agua, luz, ni teléfono desde hace tres días, lo que agrava la situación.
La tormenta tropical Usman, convertida este domingo en un área de baja presión, entró en Filipinas por el Pacífico y tocó tierra el sábado, causando inundaciones, avalanchas de tierras y otros daños.
Filipinas recibe entre 15 y 20 tifones todos los años durante la estación lluviosa o del monzón, que comienza por lo general en mayo o junio y concluye en noviembre o diciembre.