La Policía japonesa encontró el cadáver descuartizado de una niña de seis años que estaba desaparecida desde el pasado 11 de septiembre en la ciudad de Kobe.
Se conoce que los restos de la pequeña estaban metidos en varias bolsas de plástico y escondidos entre los arbustos de la calle donde vivía, en el distrito de Nagata. Las pruebas de ADN permitieron confirmar la identidad de la menor.
Cabe señalar, que las autoridades interrogaron a un hombre de 47 años, sospechoso de estar implicado en este crimen. Sin embargo, aun continúan con las investigaciones correspondientes.
