Pasión por la tecnología. Un hombre está dando que hablar en el estado de Utah, en Estados Unidos, al querer casarse nada menos con que con su ordenador portátil: una MacBook. Luego de que su petición fue negada, el abogado Chris Sevier retó a las autoridades.
Sevier ha argumentado ante los tribunales que su afecto por su futura esposa electrónica es exactamente el mismo que el de las parejas homosexuales a quienes tampoco se les permite casarse en Utah.
En una presentación de 50 páginas, sostiene: “el estado me discriminó cuando me rechazaron la solicitud de casarme con mi computadora”. “Me presenté en el estado de Utah, para obtener una licencia de matrimonio expedida para mí y para mi máquina-esposa”, dijo.
Sin embargo no es la primera vez que Chris hace noticia en esta localidad, pues hace un año demandó a Apple por, según señaló, causarle adicción a la pornografía. Aquella vez sostuvo que el navegador web Safari le presentó, sin quererlo, una gran cantidad de imágenes eróticas.
Ello, afirmó, lo volvió adicto y acabó con su matrimonio, afectando sus “sensibilidades biológicas”. Chris sostiene que el gigante tecnológico debería haber instalado un filtro de pornografía.