El penal de Lurigancho es el centro penitenciario más grande y hacinado del Perú y alberga a conocidos personajes como Andrés Hurtado 'o Marco Arenas, quien acabó con la vida de su madrastra tras afixiarla y prenderle fuego. Esta prisión de máxima seguridad tiene entre sus pasillos a condenados por delitos, pero también a profesionales de la salud que los atienden cuando más lo necesitan.
Panamericana Televisión ingresó nuevamente al penal de Lurigancho para conocer al doctor Jorge Cuzquen, jefe del área de salud de esta cárcel, donde atiende a más de 50 internos al día, dando preferencia a los adultos mayores, que equivale al 30% de la población penitenciaria y otros casos ambulatorios.
El doctor Cuzquen Salas tiene más de 15 años de experiencia profesional y ha recorrido los penales más importantes del Perú. Además, ha sido miembro de las juntas medicas que han evaluado a los expresidentes recluidos en el penal de Barbadillo. "He atendido a sicarios, delincuentes, homicidas, incluso a feminicidas. No veo a las personas por el delito, los veo como pacientes", dijo.
Atenciones más frecuentes a reclusos
Nos cuenta que en penal de Lurigancho hay 450 casos de reclusos con tuberculosis, 180 pacientes con VIH en tratamiento. Las edades de los presos van desde los 18 a 90 y atiende también infecciones respiratorias, digestivas u urinarias, así como problemas traumatológicos. De otro lado, cuenta que la pandemia fue uno de los momentos más duros que le tocó vivir porque muchos pacientes le pedían que no lo dejen morir.