Ellas tienen que lidiar a diario con la situación del alza de los productos en los mercados, para poder darles de comer a los más de "100 comensales" que acuden hasta la olla común Mujeres Luchadoras de Villa la Mina para poder alimentarse.
Ellas siempre se las buscan para poder comer, pero la fiebre del fútbol se vive en cada uno de los corazones peruanos y a pesar de como viven día a día esas madres de familia que luchan en medio de sus problemas económicos, no dejan de alentar a la Bicolor.
No importa la religión, género y ni siquiera la condición social, todos gritamos a viva voz: "Arriba Perú". A ellas no les llegó ningún bono que las beneficie. Tampoco hubo presidente o congresistas que caminen cuesta arriba, hasta llegar a su cerro para brindarles ayuda.
Pero siempre hay una luz de esperanza, este grupo de personas que se hacen llamar corazones solidarios, hacen todo lo posible para llevar donativos a quienes más lo necesitan.
Previó al partido de repechaje, todas vienen con su polo de Perú para alentar a la selección, podrá haber mil problemas en el camino, pero siempre tendrán una sonrisa que regalarle a nuestra selección y eso lo saben muy bien ellas, estas madres de familia de la olla común mujeres luchadoras de Villa La Mina, en Carabayllo.
