En muchos sentidos el Perú es un país privilegiado, pues tenemos una gran variedad de hojas, frutos, semillas y raíces que contienen propiedades curativas, por lo que poseemos el conocimiento de una de las medicinas tradicionales y naturales más completas e importantes del mundo, tan solo detrás de China y la India.
Para la conocida investigadora de la medicina tradicional, Jeanette Emmanuel, en nuestro país “tenemos casi todos los suelos casi todos los climas hemos tenido culturas excelsas donde el conocimiento del cuerpo humano fue perfecto (…) por eso es que nuestra medicina tradicional unida a nuestra biodiversidad es imparable y el mundo está regresando hoy día a lo tradicional, a lo natural”.
Es por eso, que en los últimos años la medicina tradicional de nuestra costa, sierra y selva ha tomado protagonismo nuevamente, pero esta vez para integrarse a la medicina convencional y así ayudar al paciente de una forma mucho más efectiva e integral, sobretodo en estos tiempo de pandemia por el nuevo coronavirus COVID-19.
Lo natural frente a la medicina convencional
Pero lo interesante de la medicina natural frente a la convencional o alopática, es que esta puede ser consumida no solo para curar un mal, sino para prevenirlo.
Cabe indicar que para los expertos la medicina natural y tradicional, debe ser usada al igual que la convencional con responsabilidad, recuerde que a pesar de que se trata de plantas que parecen inofensivas, contienen sustancias que de tomarse de forma incorrecta pueden generarle problemas a su salud.
