La celebración del Día del Padre se vio opacada el último domingo 15 de junio tras registrarse un sismo de magnitud 6.1 con epicentro en el Callao, que dejó como saldo un muerto, varios heridos y serios daños en viviendas.
Daños en VES y Ventanilla
En el asentamiento Ampliación Bello Horizonte, en Villa El Salvador, el movimiento telúrico provocó grietas en pisos y paredes, además de hundir el asfalto hasta unos 40 centímetros, generando preocupación entre los residentes.
Por otro lado, dos viviendas del asentamiento 8 de Agosto, en Ventanilla, sufrieron derrumbes de paredes de ladrillo y colapso de los techos de calamina, dejando inhabilitados los ambientes y sin poder retirar sus artefactos.
Huaral y Huacho afectados
De manera similar, en el centro poblado 28 de Julio en Torre Blanca, Huaral, se reportaron grietas en diversas zonas. Una madre optó por cargar a sus hijos y huir por temor a derrumbes, mientras en Huacho, un centro de salud terminó con severos daños estructurales.
Alerta por riesgo de deslizamientos
La Asociación de Vivienda Huascarán en Chosica, catalogada como zona de riesgo tras deslizamientos en 2007, fue una de las más afectadas por la intensidad del sismo. Vecinos solicitaron a la municipalidad la evacuación preventiva de residentes en zonas altas ante la amenaza de deslizamientos de rocas durante eventuales réplicas.