En un operativo sin precedentes, la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional del Perú ha logrado decomisar más de una tonelada y media de marihuana, enterrada a dos metros bajo tierra, en una zona remota de la selva peruana. Ocho hombres, presuntos traficantes de drogas, fueron detenidos en este destacado operativo.
El valor estimado de la droga confiscada supera el millón y medio de dólares. Los bloques de droga, envueltos en paquetes de diferentes formas y tamaños, se alinean en una larga fila, mostrando la magnitud del decomiso. Los paquetes presentan diversas marcas, algunas con banderas de Colombia y Turquía, otras con imágenes de hojas de marihuana.
Este impresionante logro se llevó a cabo en la comunidad de Rondiña 2, en la provincia de Mariscal Ramón Castilla, Loreto. El contingente policial sorprendió a siete hombres de nacionalidad colombiana y uno brasileño, que se encontraban en una cabaña rústica junto con el enorme cargamento de marihuana.
La hipótesis policial sugiere que la droga podría pertenecer a grandes capos del narcotráfico internacional, con la presencia de organizaciones criminales brasileras y colombianas en la zona fronteriza. Se cree que la ruta de esta tonelada y media de marihuana incluía el traslado desde Colombia por vía fluvial hasta Perú, donde se ocultaba en caletas antes de ser movida a mercados ilegales en Brasil y países europeos.
La operación policial, que desarticuló la organización criminal denominada "Los Parces", ha reforzado la frontera y las acciones contra organizaciones criminales nacionales e internacionales en la triple frontera entre Perú, Colombia y Brasil. Sin embargo, las autoridades continúan vigilando de cerca a las organizaciones más grandes que financian estas operaciones ilegales.