La Policía Nacional del Perú capturó en Comas a dos presuntos miembros de la banda criminal 'Los Injertos del Cono Norte', quienes estarían involucrados en extorsiones y atentados con explosivos en diversos negocios de Lima Norte. Entre los detenidos se encuentra Giordano Edwin Galarza Sancho, de 20 años, alias 'Peso Pluma, y un menor de edad.
Durante su intervención, Galarza Sancho realizó una llamada a su madre en la que le exigía que entregara las armas y explosivos que tenía ocultos. En el audio, el joven reconoce abiertamente su participación en delitos de extorsión y sicariato, además de admitir que recibía órdenes de alias "Chucho", quien le hacía llegar los pagos de "JJ Yojairo", también conocido como "Pantera".
El audio que revela la complicidad de su madre
En la conversación telefónica interceptada por la policía, el sujeto presiona a su madre para que colabore y entregue las armas y explosivos antes de que las autoridades las encuentren.
"Mamá, necesito todas las cosas. Ya saben todo, ya sé todo también. Voy a entregar todo. ¿Dónde estás tú? En la casa, ¿verdad? Mamá, necesito todas las cosas. Dónde están las granadas, la pistola. Voy a entregar todo. Ya saben todo. ¿Me quieres ver preso?", se le escucha decir a alias 'Peso Pluma'.
La desesperación del detenido es evidente, pues en reiteradas ocasiones insiste en que su madre le indique el paradero de los explosivos y armas de fuego. Además, el sujeto admite explícitamente su modus operandi: "Ya saben todo, saben que yo meto granada, meto plomo, todo. Mami, por favor, dame las cosas", confiesa en la llamada.
La policía confirmó que la detención de estos dos presuntos delincuentes representa un duro golpe para 'Los Injertos del Cono Norte', banda liderada por el criminal conocido como "El Monstruo".
Las investigaciones han revelado que la organización delictiva contaba con un brazo armado liderado por "Yojairo", quien coordinaba las extorsiones y atentados con explosivos contra locales comerciales. A través de "Chucho", se realizaban los pagos a los gatilleros y extorsionadores, entre los cuales figuraba Galarza Sancho.
Durante la intervención, los detenidos lanzaron artefactos explosivos contra los agentes para intentar escapar, lo que obligó a la participación de la unidad de desactivación de explosivos (UDEX).
Luego de la captura, la policía allanó la vivienda de Galarza Sancho, donde, según el propio detenido, se escondían armas y explosivos. Sin embargo, al llegar al lugar, no encontraron el material mencionado, lo que ha generado sospechas sobre la complicidad de su madre y otros familiares en el ocultamiento de las pruebas. Las autoridades continúan con las investigaciones para determinar quién más en su entorno estaba al tanto de sus actividades delictivas y si existen más miembros de la organización que siguen operando.
