La noche del último jueves 10 de octubre, el dirigente de transporte Miguel Palomino, acompañado de otros representantes del sector, se presentó en el Congreso de la República para expresar su descontento con la actual legislación de crimen organizado tras marchar por el aumento de extorsiones que están enfrentando los transportistas.
Palomino manifestó su preocupación por la reciente aprobación de la ley 32108, que, según él, no solo pone en riesgo la seguridad de los transportistas, sino que también representa una traición a la confianza del pueblo. “Estamos pidiendo que derogan la ley. Estamos representando al país para que realmente el Congreso respete la voz del pueblo”, sostuvo. Ante la falta de una respuesta favorable por parte de los legisladores, anunció la posibilidad de intensificar las medidas de protesta. “Si no sacamos hoy un acuerdo concreto, nosotros los que somos de la comisión, hasta que ustedes resuelvan ese problema, hacemos una huelga de hambre”, advirtió.
NO SE MOVERÁN DE LA AVENIDA ABANCAY HASTA SER ESCUCHADOS
El transportista, junto a los voceros de otros gremios, pernoctaron en los exteriores del Parlamento con el fin de que sus exigencias sean escuchadas. La mañana de este viernes, Palomino expresó su frustración con los congresistas, quien acusó de “burlarse de todo el Perú” al no escuchar las demandas del pueblo. “No podemos no exigir a todo el Perú que continúe con el paro, porque creo que todo el Perú trabaja el día a día”, sostuvo a Buenos Días Perú.
Por su parte, otros dirigentes de transporte y comerciantes, como el señor Julio Campos, también se hicieron presentes para respaldar la causa. Campos enfatizó que su protesta no es sólo por una ley, sino por una lucha que abarca la paz y la dignidad de los ciudadanos. “Estamos aquí presentes desde el día de ayer. Hemos hecho una huelga de hambre porque queremos una pronta respuesta”, declaró.
Palomino afirmó que “no estamos haciendo un paro de papeletas ni estamos pidiendo ningún tipo de reuniones para resolver la problemática del transporte” y reiteró que su lucha se centra exclusivamente en la derogación de la ley 32108.
A medida que se acerca la sesión extraordinaria del Congreso programada para hoy, a las 2 de la tarde, los transportistas continúan en el exterior del Parlamento, manteniendo su posición firme hasta que sus demandas sean atendidas. “No me voy a mover hasta que esto cambie”, concluyó un comerciante que se unió a la protesta, reafirmando el compromiso del grupo por hacer sentir su voz.