Una intensa persecución terminó con la captura de Guillermo Dávila Bustamante, un delincuente especializado en el robo de celulares a bordo de su motocicleta. El sujeto, conocido como el "motorizado del terror", venía cometiendo sus crímenes en las calles de Surquillo, arrebatando los teléfonos móviles de distraídos transeúntes mientras se desplazaba a gran velocidad.
SEMBRABA EL TERROR EN LAS CALLES, PERO LO SEGUÍAN LIBERANDO
La intervención comenzó cuando las cámaras de seguridad de la jurisdicción captaron al raquetero en su moto de alto cilindraje, mientras que acechaba a un ciudadano que utilizaba su celular. En cuestión de segundos, el malhechor arrebató el teléfono y huyó a toda velocidad. Sin embargo, la central de cámaras alertó al serenazgo, que rápidamente inició una persecución que recorrió varias calles y avenidas de Surquillo y Miraflores.
El delincuente, hábil al maniobrar su motocicleta a gran velocidad, trató de evadir a las autoridades realizando maniobras temerarias tras inclinarse peligrosamente en las curvas y subir a las veredas. Pese a la diferencia de potencia entre las motocicletas, el sereno que lo seguía no perdió su rastro. Finalmente, un furgón blanco y una camioneta del serenazgo le bloquearon el paso en el cruce del jirón San Pedro, lo que provocó que Dávila perdiera el control de su moto y cayera al suelo. Fue inmediatamente reducido por las fuerzas del orden.
Guillermo Dávila, quien cuenta con múltiples denuncias por el mismo delito, fue trasladado a la comisaría. Cabe mencionar, que su historial delictivo refleja que ha sido liberado en varias ocasiones debido a que sus robos son considerados de "poca monta".