El dueño de una botica, ubicada en la cuadra 13 de la avenida Perú en San Martín de Porres, ha denunciado públicamente que es víctima de extorsionadores. Con voz entrecortada y lágrimas en los ojos, el empresario, quien lleva 25 años trabajando en la zona, expresó su desesperación y temor ante la posibilidad de una venganza en su contra por haberse negado a seguir pagando los cupos exigidos por estos criminales.
"Lo único que quiero es auxilio, que se fijen en mi caso, antes de que termine en un ataúd", declaró el dueño del negocio, quien lleva seis meses pagando 1000 soles semanales a una banda de criminales. Según la víctima, estos sujetos, a quienes identifica como colombianos, comenzaron exigiendo 30 000 soles para dejarlo trabajar en paz. Al no acceder, lo coaccionaron para que pagara la suma de 1 000 soles de manera continua y puntual todos los sábados.
El último sábado, luego de meses de soportar las amenazas, el empresario decidió enfrentarse a los extorsionadores. "Me cansé, no les di nada, les dije que me maten si querían", relató. Las cámaras de seguridad de la botica captaron el momento en que el boticario, visiblemente agotado, se defendió de los criminales. "Agarré un serrucho y les dije que si me iban a matar, que lo hagan, pero no les voy a dar el gusto de cerrar mi local", recordó.
SE ENCOMIENDA A DIOS ANTE FALTA DE ACCIÓN DE AUTORIDADES
La extorsión ha dejado al empresario de 54 años sintiéndose desprotegido. A pesar de que su negocio está ubicado en un distrito bajo estado de emergencia, la extorsión continúa a plena luz del día.
El caso está siendo investigado por la Dirincri en la avenida España, mientras el agraviado, con temor por su vida, se encomienda a Dios, rodeado de imágenes de santos en su negocio. La denuncia sigue su curso, pero el miedo y la incertidumbre persisten en la vida de este trabajador, quien pide que las autoridades tomen medidas para protegerlo.