Ney Chávez Santillan, el dueño del chifa, que abatió al delincuente que ingresó a robar a su local en Villa El Salvador, por primera vez rompe su silencio.
Él siente indignación e incertidumbre, ya que ahora debe permanecer en la clandestinidad para proteger su vida y la de su familia, mientras su restaurante permanece completamente cerrado.
DENUNCIÓ SER VÍCTIMA DE EXTORSIÓN
Lo más increíble, es que el padre de familia denunció haber sido víctima de robo y extorsión en varias ocasiones, sin embargo, asegura que la Policía nunca investigó.
Él denuncia que nunca recibió respuesta por parte de la Policía Nacional, lamentablemente, ahora tras el último hecho tomó la decisión más difícil que existe para cualquier emprendedor: traspasar su negocio.
La primera Fiscalía Provincial Penal Corpotativa de Villa El Salvador abrió una investigación preliminar en su contra por el delito contra la vida, el cuerpo y la salud.
Un polémico caso, que reveló una vez más cómo están expuestos los ciudadanos ante la delincuencia en el Perú.