Los vecinos de la calle Los Naranjos, en la Urbanización Semi Rustica Canto Grande, se encuentran preocupados por una carpintería que funciona de forma clandestina desde hace 25 años y que en cualquier momento puede provocar una tragedia, pues en su interior hay gran cantidad de material inflamable.
Esta carpintería que elabora todo tipo de muebles ha sido cerrado por la Municipalidad de San Juan de Lurigancho; sin embargo, según dijeron, continúa sigue funcionando con normalidad. En imágenes se puede observar una gran cantidad de cables expuestos en el techo de este local donde también vivirían menores de edad.
VECINOS TIENEN PROBLEMAS DE SALUD
Asimismo, denunciaron que la carpintería está generando problemas respiratorios en los vecinos por los materiales que utilizan en este negocio. "Hemos recurrido a las autoridades. Esperamos que el alcalde vea que esto es una bomba latente que trabaja clandestinamente, y no les importa. Acá vivimos muchas personas", dijo.
Recordaron que personal de la comisaría Santa Elizabeth y representantes de la comuna en abril del 2021 clausuraron de forma temporal la carpintería, y dos meses después acudió la fiscal para indicar que llevarían un bloque. A la fecha, nadie se ha hecho presente en el lugar, por lo que piden la presencia del alcalde Álex Gonzáles.
MUNICIPIO SE PRONUNCIA
Tras la denuncia que fue cubierta por un equipo de Buenos Días Perú, la Municipalidad de San Juan de Lurigancho dio a conocer que el establecimiento que funciona como una carpintería clandestina había sido clausurado hasta en tres ocasiones.
Precisaron además que dicho caso fue trasladado a la Fiscalía de Prevención del Delito Zona Media, así como a la dependencia policial de Santa Elizabeth, con la finalidad de garantizar la tranquilidad de los habitantes de la calle Los Naranjos.