Así como Jesús de Nazaret le rezo a Dios Padre cuando supo que tenía que sacrificarse en una cruz por nosotros en el huerto de Getsemaní, el “Cristo de todas las Sangres”, hoy viernes santo en tiempos de pandemia del coronavirus, desde la azotea de su casa en Comas le pide a Dios que elimine de la tierra esta plaga del COVID-19.
Es la primera vez después de 41 años que Mario Valencia no cargara esa pesada cruz de 90 kilos, nuestro “Cristo Cholo” hoy deja de personificar a Jesucristo en el Vía Crucis de Semana Santa.
Hoy viernes santo, el mesías de Comas se aferra aun más a la palabra del Todo Poderoso para decirles a sus fieles que no depongan su fe ante una enfermedad que amenaza a la humanidad y con su creencia ha sobrevivido a una caída de un quinto piso que lo dejó al borde de la muerte, a un accidente de transito y a una vida de excesos y perdiciones.
Cabe señalar que las plegarias del llamado “Cristo Cholo” son para aquellos que durante 24 horas luchan incansablemente para levantar a aquellos pacientes críticos que se encuentran en las unidades de cuidados intensivos del país.