Cerca de un millón de personas acudieron a la última misa que dio el papa Francisco en la base aérea Las Palmas, pero muchos de ellos dejaron sus desperdicios en el lugar antes de retirarse a sus casas. Como se recuerda el papa Francisco pidió cuidar el medio ambiente en su visita por Puerto Maldonado, en Madre de Dios, pero a pesar de este mensaje muchos de los asistentes a su última misa en nuestro país dejaron las instalaciones de la base aérea Las Palmas llenas de basura.
Cientos de residuos fueron dejados por los miles de fieles en el recinto militar. Botellas, bolsas, cartones, envases de comida, entre otros inundaban el lugar.
Cabe indicar que demás de la basura, muchos de los baños portátiles que se instalaron en el lugar, terminaron extremadamente sucios, según denunciaron algunos asistentes.