En Japón, ahorrar energía, incluso limitando el uso del aire acondicionad en plena ola de calor, es el dilema que enfrentan los residentes de Tokio y ciudades aledañas, en medio de la peor ola cálida desde 1875.
La medida se toma con el objetivo de evitar una escasez de energía, mientras sofocan altas temperaturas que están entre los 35 y 40 grados, el gobierno japonés, pidió ahorrar luces innecesarias.
“Le pedimos a la población reducir el consumo de energía durante las primeras horas de la noche, cuando las reservas de electricidad caen a su nivel más bajo” señalaron las autoridades mediante un comunicado.
Las empresas mantienes por estos días las luces de las oficinas apagadas y hasta los ascensores han dejado de funcionar.
Cabe señalar que actualmente el suministro de energía es escaso en Japón, debido a que sus centrales siguen inoperativas desde el tsunami del 2011.
