Los jefes de Estado y Gobiernos de la Unión Europea decidieron evitar el espacio aéreo de Bielorrusia, como parte de un nuevo paquete de sanciones contra el régimen, luego que el gobernador Lukashenko detuviera el avión donde viajaba un periodista y su pareja por ser de oposición.
La decisión del régimen de Lukashenko provocó fuertes declaraciones en todas las capitales de la Unión Europea. Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, plasmó una serie de propuestas de acción en un documento que fue rápidamente aprobado por los jefes de Estado y de Gobierno.
Entre las conclusiones adoptadas están la liberación inmediata del periodista Roman Protasevich y su pareja, que todas las compañías aéreas de la UE eviten sobrevolar Bielorrusia, así como las medidas necesarias para prohibir sobrevolar el espacio aéreo de la UE a las compañías aéreas bielorrusas e impedir el acceso a los aeropuertos de la UE de los vuelos operados por dichas compañías aéreas, entre otros.
