En Australia, en una tranquila noche un inaudito hecho sorprendió a los habitantes de la localidad de Perth, y es que el cielo se iluminó con la caída de un meteorito, que descendía en forma de una bola de fuego. Desde una despejada zona de una carretera, se pudo observar mejor la sorprendente iluminación que se produjo en el horizonte. Tras el fenómeno natural de inmediato los habitantes de la ciudad, llamaron a los bomberos para reportar el hecho.
Algunos testigos señalaron que hubo rotura de vidrios en las casas y los animales se alteraron con el fenómeno.
Por su parte los expertos del Observatorio de Perth están abocados a la búsqueda de los restos de la roca llegada desde el espacio exterior.