Nuevos ataques han vuelto a sembrar el terror en Siria. La ciudad de Alepo, hoy en ruinas, fue nuevamente objetivo de la aviación rusa que descargó todo su potencial bombardeando zonas tomadas por los rebeldes.
Al menos 18 personas murieron, cuatro de ellos niños, y, por el momento, no hay reportes de heridos. Tras el estallido, los rescatistas acudieron a la zona de desastre para auxiliar a quienes aún permanecían con vida,
En tanto que los rebeldes emprendieron una ofensiva contra un barrio que está en manos de tropas leales al gobierno sirio. Cuatro personas fallecieron producto del ataque.