Una activista se enfrentó al menos a 300 neonazis que marchaban por las calles de Börlange, a unos 30 kilómetros de Estocolmo.
Se trata de Tess Asplund quien tomó esta medida luego de que oyera los pronunciamientos racistas de los manifestantes militantes del partido de extrema derecha Movimiento de Resistencia Nórdico. Asplund afirma sentirse orgullosa pero a la vez asustada por posibles represalias en su contra.
La imagen donde ella aparece con el puño en alto se ha viralizado en las redes sociales.