Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, el más buscado narcotraficante del mundo, se reunió en las montañas de Durango con el actor estadounidense Sean Penn para una entrevista publicada por la Revista Rolling Stone. La justicia estudia llamar al artista a declarar por este hecho.
La cita se dio en octubre con motivo de las intenciones que tenía el líder criminal de roda una película sobre su vida. “Suministro más heroína, cocaína y marihuana que nadie en el mundo”, llegó a alardear ante su interlocutor.
En la cena (en un lugar que solo se identifica como “montañoso y selvático”) también participó la actriz mexicana Kate del Castillo, ‘La reina del sur’. Luego de ello, Penn y Guzmán mantuvieron comunicación mediante Blackphone (teléfono que encripta las comunicaciones), correos desde cuentas anónimas y un vídeo de un mensajero a la actriz, intermediaria original del encuentro.
El encuentro de siete horas, no obstante, dio una pista clave a las autoridades, quienes lanzaron una operación en el mismo mes de octubre. ‘El Chapo’ logró fugar, dejando frustrado el segundo encuentro con el actor, donde se realizaría la entrevista formal.
Lo único que quedó fue un video donde el narco responde ante la cámara a las preguntas enviadas por la estrella. Según lo narrado por Penn, en estos dos episodios hay una clara diferencia en la actitud de este personaje.
En la cena no solo admite con descaro sus negocios sucios (algo que increíblemente negó durante años), sino que se jacta de su poder. “No quiero ser retratado como una monja. Suministro más heroína, metanfetamina, cocaína y marihuana que nadie en el mundo. Tengo flotas de submarinos, aviones, barcos y camiones”, dice.
Incluso se refiere brevemente a Donald Trump, consultado por las informaciones que aseguran que el magante ofrece 100 millones de dólares por su cabeza. “¡Ah, mi amigo!”, responde. Esta imagen difiere bastante del video, donde parece querer mostrarse más humilde.
En él cuenta sus inicios, trabajando desde los seis años en su pueblo natal, Badiraguato, en la Sierra Madre, para más tarde, a los 15 comenzar a plantar marihuana y opio para “sobrevivir”. Reconoce que consumió drogas sin llegar a la adicción, pero dice que hace dos décadas no lo hace.
“Las drogas destruyen. Desgraciadamente donde yo me crié, no había otra manera de sobrevivir”. Sobre su sangrienta reputación y las horrendas matanzas que se le atribuyen, contesta: “Mire, yo me defiendo a mí mismo, nada más. ¿Pero que yo ande buscando problemas? Jamás”.
A la pregunta de si cree que en verdad es responsable de los altos índices de consumo de droga en el mundo afirma: “No, eso es falso, porque el día en que yo no exista, no mermará el tráfico de droga”. Incluso es confrontado con su propia muerte, al preguntársele cómo cree que será.
“Sé que algún día moriré. Espero que sea por causas naturales”. Solo dos minutos y medio de esta grabación se han hecho públicos hasta el momento.