Si pasea por el Centro Histórico de Lima es imposible no pasar por la alameda Chabuca Granda, un emblemático lugar que se hizo en homenaje a la compositora peruana quien dedicó la mayoría de su música a la ciudad de Lima, como el famoso vals “La Flor de la Canela”.
La alameda fue construida en los años 90 sobre el antiguo mercado de Polvos Azules, y desde ese momento es un amplio mirador de la ciudad limeña que colinda con el Palacio de Gobierno, sobre el Río Rímac.
Este lugar cuenta con tres anfiteatros y escenarios para la variedad de música; y una original pileta de forma rectangular donde también se puede disfrutar de los más ricos platos criollos a precios populares, y en estos días, como parte de la reactivación económica, un equipo de Al Sexto Día registró colas inmensas que no eran ni para el bono ni para la vacuna.
Se trata del exitoso regreso de los cómicos ambulantes a la alameda, donde pudieron reencontrarse con su público para poder compartir risas y mucha alegría en estos duros momentos por los que pasa nuestro país.
