La tormenta de arena que azotó diversas provincias del sur del país el último jueves ha dejado afectaciones en sectores clave como el turismo, la agricultura y la pesca.
En Nasca, los fuertes vientos obligaron a suspender los sobrevuelos turísticos a las famosas líneas de Nazca, dejando a decenas de turistas varados en el aeródromo María Reiche, muchos de ellos con boletos adquiridos antes del fenómeno.
En la ciudad de Ica, las calles del centro aún permanecen cubiertas de arena, mientras que en la Huacachina —uno de los principales destinos turísticos de la región— las actividades están completamente paralizadas.
Alrededor de 140 carros tubulares han detenido sus recorridos, y los accesos a la laguna se encuentran restringidos. La afluencia de visitantes se ha reducido de forma drástica, generando pérdidas económicas estimadas en 70 mil soles diarios.
La situación no es distinta en Pisco. En la bahía de Paracas, el turismo y la pesca se han visto afectados seriamente. Playas como El Chaco, al igual que la bahía —punto de partida para visitar las Islas Ballestas—, ahora muestran una notable ausencia de visitantes, lo que ha golpeado a los operadores turísticos y pescadores de la zona.
SEMBRÍOS AFECTADOS POR TORMENTA
En Tacna, los agricultores del sector Cenizales, en La Yarada Los Palos, reportaron la pérdida total de media hectárea de cultivos de maíz morado y ají por efecto del viento y la arena.
En tanto, en la región Arequipa, el fenómeno fue aún más devastador: al menos 150 hectáreas de cultivos de maíz fueron destruidas en las zonas de Castilla y Majes, afectando gravemente a los pequeños productores.