El decano del Colegio Médico de San Martín, Anderson Sánchez, confirmó la muerte la semana pasada, en el hospital de Tarapoto, de dos bebés prematuros por daños colaterales a raíz de la falta de oxígeno medicinal en el área de neonatología.
"Para nadie es bonito ver un neonato, dependiente de oxígeno, que se muere asfixiado haciendo parocardiorespiratorio, poniéndose flácido (...) ya habían reanimado a dos niños que, incluso, se dieron por muertos, fueron reanimados y no murieron en ese momento, pero sí han muerto posteriormente por esas secuelas, la hipoxia y otras patologías", expresó.
El médico recordó, en entrevista con RPP, que hace 15 días se había advertido a las autoridades regionales la proyección de casos con coronavirus y la necesidad de contar con oxígeno medicinal suficiente.
"Es un escenario de terror la falta de oxígeno que se ha venido acentuando en los últimos 10 días y que definitivamente no solo a los pacientes con COVID-19, sino a los pacientes no COVID-19, y sobre todo a los más sensibles que son los de las unidad de cuidados intensivos: neonatos y de adultos. Es terrible esta situación", agregó.